martes, 14 de mayo de 2013

Ayer pude finalmente cumplir con el plan de entrenamiento, o sea, piscina al mediodía y carrera por la tarde, a eso de las 16:30/17h (con la fresquita). Parece una tontería pero correr con altas temperaturas y el sol que se impone desde todos sus ángulos, hace que vuelvas mas satisfecho aún del entrenamiento. Pero algo esta claro, que esforzarse en condiciones más inusuales, hace que te tengas que esforzar el triple para salir a correr, por ejemplo. 

Me eché una siestecita de unos 45 minutos y cuando me sonó el despertador a eso de las 16:25h, me pareció un suplicio calzarme las zapatillas y salir a correr. Pero es cierto que esa desgana dura poco en mi caso, no pasan más de 5 minutos cuando ya no te acuerdas del sueño, ni del cansancio ni de nada. Eso es lo que hay que potenciar!

Por una zona que paso últimamente, cerca de la localidad Puebla del Río, a la rivera del Guadalquivir, de repente me topé con unas pocas de hermandades del (maldito) Rocío, que ya les toca esta semana entorpecer y colapsar las carreteras para que puedan llegar al Rocío, como si no pudieran ir como todo e mundo, respetando el tráfico y yendo por donde no molesten. El caso es que me topé como decía con un grupo de unas 60 carriolas, muy bien colocadas y caracterizados para el evento. Imaginaros la pinta mía como chocaba entre tanto "Talibán con patillas", me miraban como si hubiera pasado un marciano a su vera. 

Hoy entreno con mi hermano Marcos la carrera, correremos unos 60 minutos aprovechando la bajada del termómetro que seguirán bajando durante toda la semana. 

Si hay alguien ahí, gracias por estar
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